La vida es más bonita de lo que uno siempre cree.

Entre la felicidad y la desesperación la carretera es muy corta, desde hace mucho tiempo las mejores noches de mi vida se acabaron para mí. No se si alguna vez volveré a vivir sin dolores, sin cables de más, que me garanticen que una piedra no se colará por mi uréter y me mandará al hospital con riesgo de irme al otro barrio.

Lo que si tengo claro es que por mucho dolor que mi cuerpo me quiera mandar, por muchos problemas que mi cuerpo me quiera mandar, nunca va a poder conmigo, porque a pesar de los dolores, de que por h o por b la vida sea tan desgraciada que te haga dar uno o incluso dos pasos para atrás, que incluso puede que sean irreversibles.

Pero os aseguro que nada, absolutamente nada es tan preciado como la vida, cuando se tiene a tu alrededor a familia y amigos que te cuidan e incluso a una pareja.

Muchas veces, estamos tan mal, en un estado de depresión tan grande que no valoramos lo que tenemos a nuestro alrededor.

Para mí por ejemplo es lo más normal hacer mi vida en una silla de ruedas, pero para una persona que tiene una lesión repentina es muy costoso adaptarse a la nueva situación, pero ahora me cuesta asumir que posiblemente vaya a pasar el resto de mi vida con más dolores que antes, pero no por eso tengo que pensar en que tengo que desaparecer, porque tengo a mi lado a gente que me cuida y me quiere y que si yo falto les daría un gran disgusto.

Por muy mal que esté uno siempre hay gente que está peor, gente que sufre más que uno mismo, incluso gente que no logra superar por lo que está pasando.

Por más que retrocedas en la salud, nunca tires la toalla y lucha por seguir adelante porque siempre habrá luz al final del túnel.

Y una cosa más, por muy hundido que estés, no olvides nunca que siempre tienes a alguien a tu alrededor para escucharte, para prestarte un hombro para llorar… Inconscientemente, cuando estamos en un estado de depresión, tendemos a alejar a las personas que más queremos, e incluso hacerlas daño, y luego cuando ya por fin estamos recuperados nos encontramos con qué esas personas que en su momento estuvieron ahí se fueron. Cuida a la gente que de verdad quieres, a la que nunca te ha fallado y seguramente nunca lo hará.

https://youtu.be/-4qCQ_Abozw

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s