Hoy echando un vistazo por las redes sociales he encontrado este titular: «discapacitada se tiene que arrastrar por todo el pasillo de un avión hasta poder llegar al aseo del mismo»esto es solo el título de la increíble noticia con la que me he tenido que topar hoy, y es que al abrir dicha barbaridad de noticia en el cuerpo de ella me ha tocado leer ni más ni menos que cuando por fin consigue llegar al cuarto de baño tiene que pedir ayuda a un pasajero para poder subirse al WC, ya que no es capaz de hacerlo por sus propios medios. También cuenta como un responsable de la aerolínea le había indicado que usara pañal, ya que no disponían de una silla de ruedas suficientemente estrecha que entrase por el pasillo del mismo.
Esto me recuerda hace unos años cuando mi familia y yo viajábamos en el Alaris camino a Gandía, pero atención no a Gandía pueblo, que es donde nos dejaba el tren, sino a la playa.
En el tren necesité ir al baño, que supuestamente era accesible, pues hasta llegar a él menuda peripecia porque la silla no giraba en el pasillo y luego no entraba por la puerta del baño así que mi gozo en un pozo.
También parece que no tenemos derecho a salir a la calle porque en la calle no había ni un solo baño adaptado hasta que entró a gobernar el equipo de Manuela Carmena (2015-19) que por fin empezó a pensar un poquito en toda la sociedad después de un montón de años de las políticas de la derecha. Fué entonces cuando se instalaron baños nuevos en las calles de Madrid y oh sorpresa accesibles para personas con discapacidad, alguien había pensado en nosotros.
A partir de ese momento podia dejar de salir a la calle sin beber ningún tipo de líquido o si lo hacía, claro está saliendo acompañada de alguien de mucha confianza y haciendo mis necesidades como un perrito, es decir abriendo el pitorro de la bolsa de pis que llevaba en la pierna y que a la vez iba conectada a una sonda fija y dejando salir el líquido en un alcorque de un árbol o en un rincón lo más discreto posible, para que no reventara la bolsa.
Lo mismo nos pasa en los centros comerciales y es que sí, el letrero de baño accesible está está, ¿ Pero qué pasa con los grandes dependientes que no podemos hacer uso del WC por problemas varios?
¿Nos quedamos en casa? ¿Nos hacemos nuestras necesidades encima? Porque no siempre tenemos la suerte de encontrar un amigo tan amigo que asuma que cada x horas tiene que llevarnos al baño cogernos y pasarnos al WC o a la camilla y en este caso cambiamos el pañal, cuando le planteamos esto a alguien suele salir corriendo así que en la mayoría de los casos nos quedamos encerrados en casa o terminamos saliendo solos o con papá y mamá hasta los treinta y muchos años. Pero el asunto es que salgamos con quien salgamos solo hay cambiadores para niños y a partir de la adolescencia empiezan a ocurrir todos los casos que he comentado antes por el simple hecho de no haber un cambiador adaptado para personas con discapacidad severa adulta y no solo eso una grúa, para que las personas que nos mueven lo hagan con facilidad.
Os dejo el enlace a la noticia que os cuento
Desde aquí exigimos a todos los organismos públicos que cumplan las leyes de accesibilidad y de una vez por todas por todas podamos ser ciudadanos de pleno derecho.