No habéis sido muchos los que me habéis abierto conversación o mandando mensaje preocupándose por mi estado de salud e incluso porque dejaba de escribir, pero es que nadie se ha dado cuenta de que hoy es el día de los

Luchando por un mundo mas justo e igualitario.Tratando de crear conciencia social
Relatos y poemas propios e inventados y en su gran mayoría dedicados a crear conciencia social
No habéis sido muchos los que me habéis abierto conversación o mandando mensaje preocupándose por mi estado de salud e incluso porque dejaba de escribir, pero es que nadie se ha dado cuenta de que hoy es el día de los
¿Os imagináis cómo sería vuestra vida si estuvierais totalmente bien y de repente con 27 años por una operación empezarais a perder movilidad? ¿Duro, verdad? Pués bien, imaginaos una persona con una movilidad ya bastante reducida pero con una vida ya hecha, con su pareja, con planes de futuro, y qué más bien que mal podía valerse por sí misma. De repente la dicen que la tienen que operar y esa operación sale mal. Pués bien esto no es una broma y no es uno de los relatos qué qué os suelo contar a diario, es el calvario que están teniendo que pasar Ana Segundo Urbano y su familia desde hace aproximadamente dos años. Ana nació con una espina bífida o mielomeningocele, un defecto del tubo neural que si no se opera nada más nacer puede ocasionar la muerte del feto.
A sus 27 años, Ana caminaba con dos bastones que le ayudaban a hacer una vida casi normal, y cuando digo casi es porque si algo bueno ha tenido siempre es que todo lo que se la metía en la cabeza lo tenía que conseguir y si no no paraba. Siempre aunque ella no lo supiese ha sido un ejemplo para muchos de nosotros.
Hace cosa de 2 años, si mi memoria no me falla, ha tenido que ser intervenida y por desgracia nada ha salido como esperaban, ha perdido toda la movilidad que tenía por lo que ha tenido que comprarse una silla eléctrica, ya que una manual es imposible manejarla para ella, bebido a sus actuales patologías.
Actualmente una silla eléctrica en condiciones, puede llegar a costar 5000 euros y la seguridad social hoy por hoy te cubre unos 3500 si no estoy equivocada por eso la compañía de teatro en la que participa desde hace años, ha decidido que su próxima función sea un evento solidario a su favor. Y se llamará «una silla para Ana». Os dejo el cartel a continuación, si queréis asistir, daos prisa porque quedan pocas entradas y si no también tenéis una fila cero en la cuál podéis colaborar. HOY ES UNA SILLA PARA ANA, MAÑANA PUEDE SER PARA TI. NO MIRES PARA OTRO LADO, PORQUE DESGRACIADAMENTE HOY POR HOY NADIE ESTÁ LIBRE Y ANA TE LO AGRADECERÁ.
Algunas veces encuentras gente a la que llamas «familia»,
sin tener tu misma sangre.
Pero hay gente que está ahí siempre, pase lo que pase y sin pedir absolutamente nada a cambio.
De esas personas hay pocas en el mundo, son las que te conocen con una mirada, con un guiño o las que te buscan cuando desapareces sin dar señales.
Con el tiempo he aprendido algo, y es que no solo ellas tienen que estar pendientes de ti, sino que uno mismo tiene que estar pendiente de ellas.
El tiempo también me enseñó algo y es que las personas tienen virtudes, pero también tienen defectos.
Tienen cosas buenas pero también cosas malas, y no por eso hay que hacer cruz y raya a la primera de cambio a la gente, sino ser un poco más transigente.
Para todos ell@s feliz 14 de febrero. Día del amor y la amistad
Hace unos días, alguien a quien quiero mucho y conozco hace veinte años. Que en su día fue alguien importante para mí, porque fue una de las personas que se encargó de fomentar mi autonomía, mi poca autonomía, es decir, que yo pudiera sentirme como cualquier otra chica de mi edad y pudiese tener amigas y a su vez poder salir a la calle con ellas, ir de pellas por primera vez, en definitiva sentirme una más de la sociedad, que por desgracia hasta ese momento nunca me había podido sentir. La encargada de todo ello me pidió si podía usar uno de mis primeros relatos para su clase de teatro, y yo sin saber muy bien lo que iba a hacer le dije que sí, y ahora una vez que yo la he pedido permiso aquí tenemos el resultado. Y la verdad no ha quedado nada mal. Gracias Conchi por qué veinte años después me sigues teniendo presente, y sobre todo gracias por estar en este pequeño espacio dónde cada día intento plasmar con letras lo que siente mi corazón. Vamos a por otros veinte años más.
Se conocieron una tarde de verano, íban a luchar por los mismos intereses,
sin saber saber que a partir de ese les iba a tocar luchar juntas con uñas y dientes.
De aquí saldría una amistad dura como una roca, que les uniría para siempre.
Juntas se convertirían en indestructibles, realizando todo lo que se les pusiera por medio.
Desde el primer momento siempre jure que nunca le soltare la mano si ella nunca me la soltaba.
Y en nada me equivoqué, porque años después seguimos cogid@s de esa mano.
Pero se unió la otra para podernos decir que nos queremos, que siempre estaremos ahí el/la un@ para el/la otra.
Para darnos esos abrazos que tanto nos gustan y que solamente nosotr@s sabemos lo que quieren decir.
Esos abrazos en los que nos susurramos cosas que solamente nosotr@s podemos apreciar.
Si nos paramos a escuchar bien esos susurros, tienen música, olor y sabor.
La música que sale de nuestras respiraciones acompañadas.
El olor de nuestras pieles y de todo lo que nos rodea o podemos llegar a imaginar.
El sabor de nuestras pieles al besarnos, mientras que nuestros brazos se enroscan por nuestros cuerpos.
No tenerte cerca es una tortura, porque cuento los días para tenerte cerca otra vez.
Aunque valoro cada segundo que pasamos hablando o simplemente haciendo tonterías telefónicas.
Tenerte es aún mejor, porque significa que estamos cerca el/la un@ del otr@.
En esos momentos son en los que hacemos nuestras fechorías más nuestras, más dulces, más hermosas, tan hermosas como tú.
Cada vez que terminan estos ratitos, vuelvo a contar las horas por tenerte cerca, por un te quiero tuyo,
oírte respirar sin que te de des cuenta y hacerte mi@ otra vez